Estos zapatitos me los encargaron para el bautizo de una niña que se llama Jimena, su mamá me pidió que le enseñase varias ideas y eligió esta.
La combinación de colores, el contenido de los zapatitos, las tarjetas con los datos del evento y el expositor formaron un conjunto encantador. A la mamá de la criatura le gustó tanto que me dió un abrazo cuando se lo entregué.
En esta última fotografía, se ve ya preparado para entregar, es una pena que la fotografía sea tan mala porque terminado quedaba super coqueto.